ENTREVISTA

DIALOGANDO CON MERCEDES RIDOCCI. Metáfora viva y expresión  corporal.

Por.© Ernesto R. del Valle

REVISTA GUATINí. Todo comenzó este año, el 28 de Julio, cuando encontré un mensaje en la Bandeja de entrada, de mi correo electrónico, que decía
Hola
Si te apetece visualizarlo...te envío el enlace al vídeo de una de mis últimas composiciones escénicas grabada el día de la representación en Madrid - 4 de Julio – 2015.
                                                https://youtu.be/5K0dN2bA-xk
Sencillamente lo abrí  y no pude despegar la vista de las imágenes  que estaba viendo El cuerpo de una mujer expresando en movimientos, la poesía del Amor, la Naturaleza, estados anímicos,  frutas, nubes, alas al viento. Se trataba de Mercedes Ridocci, Especialista en Movimiento Orgánico y Expresión Corporal – Arte del Movimiento y la invité a dialogar sobre su arte y hoy la tenemos especialmente para la Revista Guatiní, respondiendo algunas preguntas, que no lo son, sino inquietudes por conocer a esta mujer que sabe conquistar con su cuerpo las distintas  metáforas como una imago salida de lo más puro e intangible de la irrealidad.

Revista Guatiní.-Lista Mercedes, la primera pregunta. Supervive en nosotros aquel niño que nos llena de nostalgia los recuerdos. Quiero saber cómo es la niña que no has dejado a través de los años, no la que recuerda el olor de las tizas escolares ni el calor de la cocina, ¡no! esta otra que ahora mismo está leyendo, quizás con mala cara esta pregunta. ¿Cómo es ese interior infantil, que nunca se agota? ¿Esa esencia?
Mercedes Ridocci.- Antes de contestar a tu pregunta, quiero agradecer las palabras que me dedicas como presentación. Si soy capaz de expresar con mi cuerpo “las distintas metáforas como una imago salida de lo más puro e intangible de la realidad”, mi objetivo está cumplido. “Escribir” poesía con el movimiento es lo que intento transmitir en las composiciones escénicas que dirijo, las que hago en solitario y a mis alumnos y alumnas de la formación en Expresión Corporal Creativa.
Y ahora... volviendo a tu pregunta, imagino que esa esencia de la niña de la que hablas habita en el inconsciente. ¡Cuánto no sabremos sobre su estar en nuestro ser!, pero sí sé que en el campo de la Expresión a través del Movimiento (y probablemente en cualquier campo artístico) es en el inconsciente donde se genera la creación; al ahondar en las percepciones se “tocan” las capas profundas de “un yo” que despierta la huella del imaginario individual (y colectivo) que vive en la médula de nuestras células.
Por esto creo que esa “niña” de la que hablas se aloja en el “punto” más profundo de mi 
“corpórea alma”, se manifiesta en un gesto, en un paso, en una palabra, en una imagen... Probablemente, y sin yo ser apenas consciente, “conduce” mi
camino, tanto en lo personal como en lo profesional, en los aciertos y en los desaciertos, en el éxito y en el fracaso, en las luces y en las sombras.

R.G.- ¿Y cuál fue el rinconcito especial al que aquella niña acudía para conversar con sus alegrías, fantasmas y miedos?
MR.- ¿Mi rinconcito? La oscuridad de la noche apenas iluminada por la claridad que se escapaba a través de la ventana de la habitación. Cuando aparecían los malos fantasmas cerraba fuerte los ojos, si aun así seguían en la pantalla del miedo, iba a la habitación de mi madre, me acostaba a su lado, con su abrazo, su calor y su olor conseguía que los fantasmas huyeran.
Precisamente tengo un poema, ALAS NEGRAS, que si no te importa, anoto aquí (y haciendo referencia a la pregunta anterior), donde creo ver la presencia de “la esencia de esa niña” de la que hablábamos antes.
Cuando los ángeles de alas negras alumbran mi oscuridad,/ los fantasmas salen de su escondrijo./ Sin piedad, sus graznidos estentóreos aturden mis sentidos,/ agujerean mi querencia con sus cuernos puntiagudos,/ desgarran mis ilusiones con sus uñas retorcidas./ Entonces mi alma se arquea sobre sí misma,/ mi aliento  se enreda entre telas de araña,/ mi cuerpo se anuda entre ovillos deshechos/ y mi voz grita tu nombre.
Sin embargo los buenos fantasmas, los sueños, los vivía  en solitario. Vengo de una familia humilde, yo dormía en una habitación compartida, y mi casa era pequeña. Mi gran sueño era tener una casa grande, una habitación propia, decorarla con mis cosas,  un lugar donde guardar mis pequeños tesoros: una caja de lata decorada con dibujos infantiles, mis cuentos, mis dibujos e incluso mis pequeños e ingenuas letras... Y mira... otra vez aparece la niña que vive dentro de mí, hoy tengo esa casa, esa habitación propia y tengo un lugar donde guardar mis pequeños tesoros.

R.G.- Hay un hito en la historia de tu vida que marcó la edad del enamoramiento más pueril y alucinante, tus diez y seis años. Te integras al Grupo de Teatro Libre y Popular y comienzas a participar en las Tertulias Literarias y a la vez, en la lucha contra Franco. ¿Cómo fue eso? ¿Tienes alguna anécdota sobre esta etapa?
MR.- Fue una de las etapas más hermosas de mi vida, la ventana que me abrió al mundo, a lo que hoy soy.
En el grupo de teatro descubrí el método Grotowki, su teatro pobre, sin medios técnicos ni artificios, solo el cuerpo del actor como única herramienta, descubrí lo que es ahondar en la memoria emocional que despierta el movimiento y como éstos iban dibujando al personaje. Me descubrí como actriz, aunque sería más tarde cuando centraría mí hacer profesional en la Expresión a través del movimiento, pero de eso ya hablaremos más adelante.
También fue en esta época que comencé a leer a poetas y dramaturgos comprometidos con la época que estábamos viviendo. Hago referencia, entre otros, a Miguel Hernández, Blas de Otero, Cesar Vallejo, Gabriel Celaya, Jerzy Grotowki, Bertolt Brecht, Antonin Artaud, etc, etc. Todas estas lecturas me llevaron a participar en tertulias literarias y conocer a poetas que hoy son referentes en mi ciudad natal, señalo como ejemplo a Antonio Gamoneda, por ser un poeta de gran proyección, pero hay mucho más.

Nunca fui activista política, no milité en ningún partido, mi lucha estuvo en la denuncia a través de las obras de teatro que presentábamos, en las reivindicaciones políticas en el instituto y en general desde mi forma de sentir y actuar en mi vida personal y social.

RG.- Te trasladas a Madrid. Ya en esta etapa hay un vuelo más firme, tenías ciertos conocimientos sobre psicoanálisis de la expresión de las emociones a través del comportamiento del cuerpo. ¿Es el momento en que te entregas por completo a la danza?
MR.- Te diré cómo surgió la necesidad de centrarme en la Danza de la Expresión.
La educación y la enseñanza es algo que me atrajo desde muy joven, así que ingresé en la escuela CITAP y me formé en Psicomotricidad relacional, promovida por los pedagogos Lapierre[1] y Aucouturier[2], y aunque nunca se sintieron vinculados a ninguna escuela en concreto reconocen recurrir a muchos de los conceptos de Freud y Lacan entre otros.
Esta metodología se basa en el concepto de que “las experiencias corporales que vive el niño cuando interacciona con el mundo, fundamentan su psiquismo desde las representaciones inconscientes más originales hasta las más conscientes”. Desde su expresión psicomotriz el niño se manifiesta a sí mismo, es desde la vivencia como el niño integra los conceptos abstractos de espacio y tiempo (la geometría, la matemática, la física, la música, etc.)
Pues bien, en los ejercicios de la formación yo me daba cuenta de que más allá de la Expresión Psicomotriz, más allá de su lectura para la educación y la reeducación, me atraía la expresión del gesto, su ritmo, su contenido, su belleza, su “danza”, una “danza” que surgía de lo que el cuerpo guarda y demuestra cuando se le permite la expresión. Y fue entonces cuando me puse “manos a la obra”. Busqué escuelas de Expresión Corporal hasta que di con el estudio de Marta Schinca de la que hablaré en la respuesta a tu siguiente pregunta.

RG.- Me llega los nombres de la argentina Patricia Stokoe[3] y  Perla Jaritonsky[4]. ¿Cuales fueron tus maestros? ¿Quiénes te impulsaron a la investigación de este Arte?
MR.-  Teniendo en cuenta que yo venía de una experiencia teatral donde el cuerpo era el motor de la búsqueda de las emociones del personaje, donde mi formación en Psicomotricidad también partía de la vivencia corporal, no fue casualidad “elegir” a Marta Schinca. Todo va encajando en mi camino profesional.
Su línea metodológica tiene sus raíces en la escuela alemana de principios de siglo cuyos máximos referentes son Rudolf Bode, J. Dalcrozze, Rudolf V. Laban ... de todos ellos surgió la Danza Expresionista alemana, cuya máxima representante fue la bailarina Mary Wigman y posteriormente la gran referente de la danza contemporánea Pina Bausch.
Se basa en la concepción psicofísica del cuerpo, donde lo físico integra lo psíquico, y es desde la sensibilización de las percepciones y de un conocimiento profundo del cuerpo, del espacio y del ritmo, como se conecta  con las capas más profundas del yo, donde habitan todas las emociones. Y es desde ahí, desde esa conexión,  desde donde se expresan las emociones (y no desde códigos externos como ocurre en otras líneas de trabajo), donde se encuentra el lenguaje propio, derivando hacia la creatividad y el arte.

Bebí de todos ellos: de mi director teatral (Enrique Fernández, más conocido por  Kike, fundador del vanguardista y revolucionario Grupo de Teatro Libre Independiente); de mis formadores en Psicomotricidad, (destacando expresamente las enseñanzas de Jesús Castro Llano sobre “la simbología del movimiento” y de Félix Fernández Vidal, sobre la “Educación Rítmica aplicada a la educación”) y de  los conocimientos que me transmitió Marta Schinca, donde auné y encontré la estructura metodológica de todas las enseñanzas que había recibido. Desde ahí he ido creando mi propio hacer profesional.
A Patricia Stokoe  la conozco a través de sus libros, pero nunca he trabajado con ella. Su metodología, tiene puntos comunes con la de Marta Schinca, hemos de tener en cuenta que aunque Patricia sea argentina y Marta uruguaya, ambas, de alguna manera, han bebido de lo mismo.
A Perla Jaritonsky no la conocía, has sido tú quién me ha hecho saber de ella. Gracias.

RG.- En el video que me enviaste y he colocado en esta entrevista, vi a alguien que me miraba fijamente detrás de una máscara como diciendo “no te vayas, no te apartes de esta imagen” ¿Quién es Mercedes Ridocci cuando se encuentra en plena actuación corporal?
MR.- De alguna manera “dejo de ser yo misma” como autora, como la persona que es Mercedes Ridocci, y me adentro de lleno en el “personaje que presento”, en su poética.
De la misma manera que soy de la creencia de que no hay que confundir al poeta con su yo poético, aunque el yo poético viva en el poeta, también pienso lo mismo respecto a la Expresión en el Arte en el Movimiento, no hay que confundir al creador con su creación.

RG.- ¿A partir de cuándo eso que llamas Vivencia Corporal, comienza a fluir hacia el espectador?
MR.- Cuando el actor, el bailarín (o cualquier otro artista) lo que presenta ante el espectador tiene su raíz en la vivencia íntima, y una vez “modelada” mediante el lenguaje y la sintaxis corporal, el espectador no queda inmune, “le toca las tripas”, siente que es verdadero lo que ve. Al pertenecer lo que está recibiendo al mundo poético-metafórico, al no ser obras cerradas, proyecta su propio imaginario, se ve en la obra, siente que de alguna manera están hablando de él, del mundo que vive.  
Siempre que presento una obra después establezco un coloquio con el público, no puedes figurarte lo que aportan sus interpretaciones, te das cuenta de que ellos han trascendido tu creación, han visto más allá de lo que una podía imaginarse, y esto se debe a trabajar desde la metáfora, siempre abierta a la imaginación del espectador.

RG.- Metáfora corporal y Metáfora literaria. Mercedes tiene dos libros sobre la técnica del movimiento del cuerpo, pero…también escribe poesía, desde su entrada al Taller Literario de Ramón Alcaraz García, ¿algo que contar sobre esa etapa de tu vida?
MR.-Fue todo un descubrimiento. Hacía tiempo que yo ya escribía pequeños relatos, pero me daba cuenta de que me faltaban recursos literarios. Busqué talleres de escritura creativa, y encontré el taller “El desván de la memoria” de Ramón Alcaraz García. Uno de los primeros ejercicios fue escribir una poesía donde todos las palabras debían comenzar con la misma letra, lo primero que pensé fue ¡Pero si yo no soy poeta!, así y todo, y con toda mi inseguridad, me puse a ello. Cual sería mi sorpresa cuando Ramón me dijo: “Mercedes, tienes más poética que muchos que se creen poetas”, y ahí empezó todo, desde entonces no he dejado de escribir, por esto es que siempre digo que fue Ramón quien descubrió “ese mundo” que guardaba dentro de mí. Poco a poco me fui dando cuenta que existía un gran paralelismo entre mi poética corporal y la poética del verbo, que ambos pertenecían al mismo esencial, solo que se construyen con lenguajes diferentes. De ahí, como dijo la poeta y periodista Gloria Díez en la presentación de mi poemario “La poesía de Mercedes Ridocci tiene algo de danza y su danza mucho de poesía”. De hecho muchos de mis poemas están inspirados durante el proceso de composiciones artísticas y viceversa. Haré referencia en la última pregunta.

RG.- Leo tu poema Bicho en las entrañas. Dices…
Tengo un bicho en las entrañas, / cuando siembro la tierra con semillas de trigo, / las arranca con sus dedos retorcidos.
Tengo un bicho en las entrañas/ Cuando amanezco sobre nubes serenas, / despunta en tormentas de rayos y truenos.
Tengo un bicho en las entrañas, / cuando mi cuerpo danza al son de olas, / ahoga el agua.
Tengo un bicho en las entrañas, / cuando soy fuego en mi alma, / me despoja de sus llamas.
¿Te consideras dentro de la vanguardia literaria contemporánea?


MR.- No tengo ni idea de si mi poesía pertenece al mundo de la vanguardia, nunca lo he considerado. Quizá sea cómo la definió el maestro, poeta y traductor Pere Bessó en una de las conversaciones que hemos mantenido: “Tu poesía es una poesía personal y muy intuitiva. La elaboración de tu escritura es posterior a tu actitud perceptiva. En cierto sentido, transracional, translógica, intuitiva para captar el instante en que el caldo hirviente de la Metáfora Originaria se hace verbo...
En ese instante de la danza de metáforas del Universo que son lo Uno y lo Diverso tú bailas y captas el resquicio.
La escritura del poema viene después, sólo después, tras la danza de la fluencia y la uterancia...
Pero eso es el devenir de tu escritura. Puro flujo hacia el in-flujo. Pura intuición hacia el poema...”.
No sé..., quizá tenga razón Pere Bessó y que dicho sea de paso quiero agradecer públicamente todos los poemas que me ha comentado y traducido al catalán, los cuales están íntegramente publicados en mi blog Páginas Escritas y recogidos en el poemario auto publicado “Los dientes del infierno”

RG.-Háblame de tu libro Lava del alma, publicado en la editorial Playa de Akaba y prólogo del poeta Alcaraz García y en el que, se encuentran el amor  [infaltable] las carencias del alma, como la soledad y las ausencias, pero también la pasión, pensó que de allí el título del poemario
MR.- Como bien dices, en el poemario “Lava del alma” se encuentra el amor, la soledad, las ausencias y la pasión, pero son los lectores los que han de hablar de él.
Apuntaré, por poner un ejemplo, algunas críticas de las reseñas que me han hecho. Dice la poeta Tatiana Aguilera Muñoz: Como una corriente impetuosa de palabras y cuidadas metáforas, Mercedes nos entrega y se ofrenda a sí misma como un volcán rabioso de creativos e intensos versos, donde la mujer creadora habla desde su cuerpo y lo concede desafiante, poseída del genio creativo, validando con soltura su "yo mujer" en forma tan directa y rabiosamente sensual, que se agradece leerle”.
O el poeta y cronista Toño Morala: En el poemario "Lava del Alma" de Mercedes Ridocci, rápidamente te das cuenta que estás ante un muy trabajado poemario; con unos versos que llegan directos y con ese compromiso claro y conciso, limpio, y lleno de secuencias y esa atmósfera sin cronología previa. Versos que nacen y mueren en el amor, para pervivir eternamente en poesía.
Para todos aquellos lectores de esta revista que estén interesados en saber algo más sobre mi poemario “Lava del alma”, pueden pasarse por mi blog donde tengo registradas las reseñas que me han hecho sobre el poemario “Lava del alma”. Insisto, creo que es el lector quien debe hablar de mi poesía.

RG.-El colega Alcaraz, en una parte de su prólogo dice: “El amor y la lava pasional discurren entre sus versos como un torrente que nos arrastra y nos lleva; el alma habita en la orilla y también en el abismo. El amor es una isla y un volcán al mismo tiempo."  No siempre uno, como autor, está de acuerdo con algunas apreciaciones hechas por el prologuista. ¿Estás de acuerdo con esta afirmación?
MR.-Totalmente, nadie mejor que Ramón conocía mi poemario, cada poema, cada verso, de hecho fue él el que lo revisó antes de publicarlo, nadie mejor que él pudo captar la esencia de este poemario.

RG.-Para concluir, deseo exponer este poema Luna de hiel  y desearía, no que lo expliques, sería una tontería, porque el poema, dijo Martí, se explica por sí solo.
Pero el trasfondo de un poema siempre tiene una historia, un objetivo y es allí lo que quisiera me explicaras.
Retuvo para él todas las caricias,/ todos los besos,/ las palabras bonitas/ Se envolvió en raso blanco/ anudó sus recónditos labios con lazos de deseo,/ que él desataría con manos expertas,/ávidas del calor que le ofrecía.
No hubo caricias,/ ni besos,/ ni palabras bonitas./ Con manos frías y violentas/ mancilló el blanco raso de gris ceniciento,/ desgarró los lazos del deseo,/ derramó hielo sangriento en sus labios heridos./Infectó todo su ser de rabia y miedo
MR.-Aquí es dónde voy hacer referencia a lo que te comentaba cuando te hablaba de la relación entre mi danza y mi poesía
El poema de Luna de Hiel surge mientras estoy realizando la composición escénica que lleva el mismo nombre. Una denuncia contra los estragos que ha provocado en las mujeres las culturas machistas, moralistas, retrógradas e intransigentes. Una denuncia contra el maltratado asumido socialmente. La mujer llegaba al matrimonio sin ninguna experiencia, sin conocer  al hombre con el que iba a compartir su vida. Había que llegar pura y virgen al matrimonio, solo el marido tenía derecho a desvirgarte, es más, podías ser repudiada, sellada y marginada para toda la vida si la mujer había tenido relaciones sexuales fuera del matrimonio y máxime si había hijo por el medio (prueba fehaciente de ello). La mujer llegaba al matrimonio con toda su inexperiencia, ilusionada con el hombre que creía iba a ser su cariñoso marido, respetada y amada por él. El matrimonio fue la entrada al “patíbulo” para muchas mujeres, se encontraron con maridos que se creían los dueños y señores de sus mujeres, se las anulaba. A las mujeres se les derrumbaban sus ilusiones, sus expectativas, ni pensar en la separación, no estaba permitido por la religión, y si por casualidad alguna se escapaba de ésta, tampoco había escapatoria, dependían económicamente del marido, cuando se casaban era para dedicarse en exclusiva a su marido y a sus hijos.
Estas razones me movieron a realizar este poema, esta composición escénica, esta denuncia.

RG. Gracias estimada Ridocci, ha sido un placer dialogar contigo y recibir el placer de tus respuestas para los lectores de la Revista Guatiní.
MR.- gracias a ti por darme la oportunidad de dar a conocer a los lectores mi hacer profesional y poético



[1] ANDRÉ LAPIERRE.- Fisioterapeuta, profesor de educación física y psicomotricista. Ex presidente de la Asociación Francesa de Educación y Reeducación Psicomotriz e impulsor de la Psicomotricidad Relacional, es el creador del Análisis Corporal de la Relación.
[2] BERNARD  AUCOUTURIER.- Pedagogo francés, creador de la práctica psicomotriz. Fue profesor y director del Centro de Educación Física Especializado de Tours, Francia. Es el fundador de la Asociación Europea de Escuelas de Práctica Psicomotriz. Por su tesis recibió el premio del Ministerio de Juventud y Deportes de Bélgica.
[3] PATRICIA LULÚ STOKOE (1919-1996), bailarina y pedagoga, creadora de la Expresión Corporal-Danza y de la Sensopercepción. Nació en Buenos Aires, Argentina y pasó su niñez en la estancia que administraban sus padres en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires.
[4] PERLA JARITONSKY. Es profesora de expresión corporal y psicóloga social. Autora del Diseño Curricular del área para el Nivel Inicial, actualmente dicta cursos de formación docente de expresión corporal en forma privada y en la Escuela de Capacitación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (C.E.P.A.). Participa de congresos internacionales y nacionales como panelista y dando talleres. Es autora de numerosos artículos y publicaciones en el país y en el exterior.


Comentarios

  1. Ernesto, antes de comentar deseo saludarte y felicitarte por tan interesante entrevista a la destacada artista y poeta Mercedes Ridocci. Te contaré que a ella la conocí por esta maravillosa red de escritura que son los denominados Blog. No recuerdo la fecha exacta cuando descubrí su espacio; pero si, el efecto inmediato que me produjo su forma de expresar, porque sentí el ritmo en las letras. Era un tipo de escritura con cadencia y movimiento, un algo más allá de la musicalidad propia de un buen poema. Era una poeta. Una muy buena poeta.
    Dejo para ti mi felicitación y un abrazo inmenso a Mercedes.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Especial de Frida Kahlo por los 61 años de su muerte [Tomado de Cuba Debate]