Poemas del libro PEDAZOS DE LA NOCHE
El día 20 de Agosto fue la última visita que hice a este Blog, fue con la entrada de uno de los relatos de mi libro AQUELLOS NIÑOS QUE SOMOS, Relatos que venía exponiendo de manera seriada, desde el 21 de Mayo de este mismo año.

La noche inconclusa del asesinado en plena calle, con la Patria atravesada en medio del pecho.
Las noches de la cruz y la ceniza en los labios mancillados del aborto.

La noche embarazada por el Guernica de Picasso
Virtualmente apagada en los cuadros de Molné.
Neruda con la noche bajo el brazo paseándose por la alta cintura de Isla Negra.
La noche eterna de los sentenciados a muerte.
Tu noche y mi noche tan hipocondriacas e iguales.
Nuestras noches en Paz y en versos.

La noche me derriba,
entre vidrios y piedras,
sobre la luna escuálida.
LA COPA DEL MIEDO
Westchester, Miami, Diciembre 2013
Hoy regreso con varios poemas del libro en preparación LOS PEDAZOS DE LA NOCHE. Estoy en los preparativos de publicación del poemario AMEN DE MARIPOSAS, más dos libros del genero Infantil, uno de poesía, CARRUSELL DE RONDAS ; otro de cuentos y relatos, AQUELLOS NIÑOS QUE SOMOS.
El ultimo Nro. 132 de Guatiní salió recién ayer, por lo cual aprovecho para agradecer a los colaboradores cubanos de la Isla y fuera de ella el envío de sus trabajos, así como a todos en general.
A continuación los poemas del libro
,Abraza la noche -con fuerza infinita-
los astros del sueño, la paz del insomnio.
Le da de su pecho la palabra escrita
que el Hombre devuelve en verso o demonio.
INVENTARIO
El condenado a muerte
lanza sus dados a lo eterno.
Todos aherrojados en la misma alquimia nocturnal.
Todos en el mismo tablero de la vida.
Todos aherrojados en la misma alquimia nocturnal.
Todos en el mismo tablero de la vida.
En la
noche.

En su circuito sideral, cantan sus himnos los astros.
Una magnolia de tersa piel
inflama los aromas en sus coordenadas
y en toda su magnificencia la noche se extiende a los límites de lo ilimitado.
Es allí donde el Hombre aquieta sus músculos,
aduerme los apetitos más elementales,
revierte sus miserias y temores.
y en toda su magnificencia la noche se extiende a los límites de lo ilimitado.
Es allí donde el Hombre aquieta sus músculos,
aduerme los apetitos más elementales,
revierte sus miserias y temores.
En esa misma estancia el animal descansa de su carga
y peina sus instintos.
Porque en la noche el amor es otra flor incalculablemente hermosa.
La mujer y el hombre desnudan su alma
y peina sus instintos.
Porque en la noche el amor es otra flor incalculablemente hermosa.
La mujer y el hombre desnudan su alma
para hacerse
uno.
En la noche, también el alacrán ataca.
Le sobrevive el miedo a la serpiente.

El poeta, mientras tanto, vive la noche, se regocija en ella,
le muerde sus fantásticos pétalos,
le ordeña los jugos con que alimenta sus vivencias...
Escribe.
Le sobrevive el miedo a la serpiente.

El poeta, mientras tanto, vive la noche, se regocija en ella,
le muerde sus fantásticos pétalos,
le ordeña los jugos con que alimenta sus vivencias...
Escribe.
PEDAZOS DE LA NOCHE
La noche y la bestia agazapada, emboscando la
tranquila rosa tras el velo de la bruma.
La noche en el filo de la navaja y en el aguijón de la avispa.
La noche de la luna fria en el aullido del lobo, en la lengua de la víbora y en el tronco de la ceiba, donde lloran los ancestros y hacen el amor las lagartijas.
La noche de las muchachas violadas a orillas de las imploraciones, en las márgenes
lamentables del amor sin alas ni espacios para el vuelo.
La noche de quien no ha nacido y se resuelve a ser solo un punto en la corola del vientre que lo acoge.
La noche en las entrepiernas de las prostitutas, húmedas del semen y las salivas clandestinas.
La noche en el filo de la navaja y en el aguijón de la avispa.
La noche de la luna fria en el aullido del lobo, en la lengua de la víbora y en el tronco de la ceiba, donde lloran los ancestros y hacen el amor las lagartijas.
La noche de las muchachas violadas a orillas de las imploraciones, en las márgenes
lamentables del amor sin alas ni espacios para el vuelo.
La noche de quien no ha nacido y se resuelve a ser solo un punto en la corola del vientre que lo acoge.
La noche en las entrepiernas de las prostitutas, húmedas del semen y las salivas clandestinas.

La noche inconclusa del asesinado en plena calle, con la Patria atravesada en medio del pecho.
Las noches de la cruz y la ceniza en los labios mancillados del aborto.
Las noches azules de mi Isla brujuleando en el
mar de las Antillas,
la alquimia vegetal de su gente bullanguera y
decidida.
La
noche en su versión de estuario.
En su misión de miedo y desvelo.
En su misión de miedo y desvelo.
La
noche eterna de mis muertos.
Javier
Heraud y la noche en su canana guerrillera en las selvas de Perú.
La de
mi hermano comido por el cáncer
Víctor
Jara con la noche sobre sus hombros a manera de poncho y la guitarra en ristre.
Asesinada
y sin luna verde a los pies de los victimarios de Lorca.
La noche en su propia encrucijada de violencia y muerte.
La noche despertando en Valle Grande sobre la escuelita de La Higuera
La noche en su propia encrucijada de violencia y muerte.
La noche despertando en Valle Grande sobre la escuelita de La Higuera
La
noche derramada en la copa del expresionismo.
En los marasmos de la épica surrealista.
En los marasmos de la épica surrealista.
La noche embarazada por el Guernica de Picasso
Virtualmente apagada en los cuadros de Molné.
Neruda con la noche bajo el brazo paseándose por la alta cintura de Isla Negra.
La noche eterna de los sentenciados a muerte.
Tu noche y mi noche tan hipocondriacas e iguales.
Nuestras noches en Paz y en versos.
Infusión
y trago a rebanadas.
Y la noche en pedazos para que cada cual tome
el suyo
y lo disuelva en el alma como polvo cósmico
INSOMNIO
(Decineto)
El cuervo de la noche me ha clavado sus garras
en un absurdo celo de fuego y de memoria
le acomodo las plumas del pecho y de las alas
la luna se revuelve loca entre las magnolias.
le acomodo las plumas del pecho y de las alas
la luna se revuelve loca entre las magnolias.

La noche me derriba,
entre vidrios y piedras,
sobre la luna escuálida.
Insomnio en la retina.
La pesadilla queda.
La pesadilla queda.
El sueno
se desgrana,
NOCHE NEGRA
La noche y su
colmillo me espera dentro
de mis miedos. Me espera a mansalva para
conquistar mis sudores más elementales,
para escupirme su sombra en cada esquina
para emboscarme en sus polvos y misterios.
de mis miedos. Me espera a mansalva para
conquistar mis sudores más elementales,
para escupirme su sombra en cada esquina
para emboscarme en sus polvos y misterios.
La noche muerde
duro los pasos de mis rutas;
mis ojos se pierden en sus cuencas íntimas
entonces me mira con sus ojos de espanto,
me asusta su vientre de sombras, su piel
de suave almendra que satura los sentidos.
mis ojos se pierden en sus cuencas íntimas
entonces me mira con sus ojos de espanto,
me asusta su vientre de sombras, su piel
de suave almendra que satura los sentidos.
Pero amo la
noche y amo sus zumos de gardenia
y me adentro a ella para conquistarle sus aromas,
para saborear su planetario espacio, su envoltura
de femeninas cumbres y amaneceres
y me adentro a ella para conquistarle sus aromas,
para saborear su planetario espacio, su envoltura
de femeninas cumbres y amaneceres
que le nacen
muy dentro de su furia ensangrentada
Amo la noche
que me envuelve, que me arrastra
hacia su enorme caudal de versos
hacia su enorme caudal de versos
Amo la noche y
me arraigo a sus hechizos
a sus velos frutales a sus enormes lanzas
que se clavan hondo en mi corazón humano.
a sus velos frutales a sus enormes lanzas
que se clavan hondo en mi corazón humano.
LA NOCHE EN SU CASCARA DE BRUMAS
Salvo
mi noche
de la depredación y la violencia. ![]() Como una cascara de brumas
guarda
su carne
madura y tormentosa
y
me cubre leve,
en sus magníficos jugos en la que los líquenes del alma se van
adormeciendo.
LA NOCHE EN SU DESNUDÉS
Un
pedazo de noche acaricia la desnudez
de esta mujer que sospecha los intentos, ![]()
Entonces se aparta
el
velo de sombras
y
me establezco
sobre
la fruta celestial
donde
todos los astros
se
hacen uno
para penetrar sus laberintos como el Fauno que soy para sus ansias. La noche es, a partir de entonces, manifestación magia y hechizo |
ME VISITA LA NOCHE
Oscura me visita,
revisa mis papeles.
va llenando los resquicios y oquedades, se va asentando en los recintos establecidos, se acomoda como una visita esperada. Le brindo de mi copa y escancia el licor
de mi cotidianidad de un solo trago.
![]() Me mira la noche y yo la enfrento como la mujer que es le despojo de la capa de temor on que se cubre y me sorprende la hermosa piel de su vientre astral la tersa, inigualable tersura de sus senos orbitales el abultado pubis cósmico e inviolable. Aparto libros y papeles de la mesa
y la noche se echa fantastica,
atrayéndome
a su embrujo
y la tomo leve por el talle.
mi beso se pierde entre los equinoccios de su cuello mientras ella, en un único, sosegado suspiro de sensual epifanía se cubre nuevamente y se marcha dejándome a la deriva en el tiempo un sabor a cenizas de estrellas en los labios y este poema que pario sobre la mesa. |
Escancia sus líquidos ,
bajo el ceibo del ahorcado.
En las venas de la yagruma
sus infinitos laberintos
va marcada la ruta de la noche.
¿Cuántos no hemos
bebido sus jornadas
de amianto insomne?
Cuántos no hemos
rendido a la noche,
en la apoteosis de la primavera,
bajo el ceibo del ahorcado.
En las venas de la yagruma
sus infinitos laberintos
va marcada la ruta de la noche.
¿Cuántos no hemos
bebido sus jornadas
de amianto insomne?
Cuántos no hemos
rendido a la noche,
en la apoteosis de la primavera,
nuestras rebanadas de inocencia?


Yo vengo con mi nombre,
yo vengo con el musgo
en mis pulmones,
con la llaga de mi corazón
en alerta
a tomar el pulso de la noche
en mis diástoles y sístoles
para beber alucinado
sus líquidos,
su tanta y tanta
nocturnidad y mis insomnios.
yo vengo con el musgo
en mis pulmones,
con la llaga de mi corazón
en alerta
a tomar el pulso de la noche
en mis diástoles y sístoles
para beber alucinado
sus líquidos,
su tanta y tanta
nocturnidad y mis insomnios.
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