JULIA CORTES PALMA. Ella y sus circunstancias
ENTREVISTA
Por Ernesto R. del Valle.
La encontré como se encuentra una fruta en medio del camino.
Una fruta de mucho jugo para aliviar la sed. Porque esta mujer es también como
una fuente de poesía, poesía que habla de amor, la cotidianidad, la muerte, las
angustias insalvables del Hombre y sobre todo, de su rebeldía a no ser quien
fue por más de cincuenta años, una mujer triste, plagiada, echa para los demás menos para ella misma.
Profesora, ama de casa, madre de cuatro hijos y abuela.
Colabora con entidades poéticas de Latinoamérica y escribe en la revista
cultural La esquina de Colombia, así como, de vez en cuando, en la prensa de su
ciudad.
ERNESTO R.
DEL VALLE.- Ante todo deseo platicar con
esa niña que vive dentro de ti, esa que en las noches, quizás aún teme a lo
oscuro, sabiendo que definitivamente el miedo vive dentro de nosotros. Quisiera
que esa niña me cuente de sus primeras experiencias en la casa hogareña donde
nació en Badajoz. Sus juegos, sus amigos. Anécdotas, etc..
JULIA
CORTES PALMA.- Cierto, le tenía mucho
miedo al infierno. Las monjitas del colegio me decían que si moría y me
sorprendía en pecado ardería en el infierno.
Jugaba en la escalera
de mi casa( cuando llovía o hacía frío), con mi vecina Mamen, a los cromos, a
la goma o a la cuerda. Cuando estaba bueno jugábamos en la calle, a la role, o
al pincho( cuando había barro y le cogía el destornillador a mi padre). Con el
buen tiempo salíamos de paseo con las bicicletas. De vez en cuando organizaba
en el portal de mi casa una sesión de variedades: Pequeños teatros, canciones,
bailes...Como si yo fuera la gerente de una empresa de espectáculos.
No tenía muchos
amigos, siempre fui muy selectiva para las amistades.
Tuve varias
experiencias(anécdotas) de chicos y no tan chicos que quisieron tener algún
escarceo sexual al que yo me negaba siempre. Sin dar ningún dato confieso que
hasta algún miembro de la iglesia llegó a confesarme su debilidad por mí. Hubo
quién me avisó que mi mirada tenía algo adictivo que incitaba.
Los chicos me aburrían
enseguida, eran demasiado simples y siempre iban a lo mismo sin profundizar en
mi alma.
ERDELV.-Háblame de
Badajoz, el terruño que escogieron tus padres en España, para que nacieras.
JCP.- Nací en casa de mis abuelos maternos, no quisieron
que acaso me confundieran o perdieran en el hospital.
Badajoz es una ciudad
pequeña (150.000habitantes) donde casi
todos nos conocemos porque solemos frecuentar los mismos lugares. Situada al suroeste de España, fronteriza con Portugal; es una de de las dos
provincias que componen Extremadura. Tierra dura de gente tierna; de extremos:
inviernos fríos y secos y veranos calurosos. Una ciudad alegre y divertida
donde la gente prefiere la fiesta a la cultura. Los bares se llenan pero los
eventos culturales no seducen.
ERDELV.-
Tu casa natal. Ese rinconcito tibio donde te guarescías a imaginar tus
vivencias infantiles, ¿Cómo fue esa etapa de tu vida?

Disfrutaba con el silencio, era feliz
cuando se marchaban mis padres, mi hermana
se iba a jugar y yo me quedaba sola en casa.
JCP.-
Mi relación con mi madre no era demasiado buena, gritaba mucho y era muy nerviosa
y eso a mí no me gustaba. Hoy esa relación ha mejorado tanto que ahora es mi
mayor fan. Lee todo lo que escribo y, junto a mi padre, me sigue
a todos mis eventos. La edad nos mejora,
no cabe duda. Es cierto eso de que “nos
hacemos viejos demasiado pronto y sabios demasiado tarde” .Con mi padre
me llevaba mejor aunque, en alguna ocasión me pegó por no obedecer.
ERDELV.-¿Quien
influyó en tus primeros textos. Qué lecturas estaban presentes en esos primeros
momentos de creación?
JCP.- Leía todo lo que encontraba en
casa: poesía, novela romántica, libros juveniles de aventura, enciclopedias, de
todo. Por leer, leía hasta los prospectos de las medicinas. Me gustaba visitar
a familiares, entre otras cosas, por leer más libros.
ERDELV.- ¿Quienes
fueron las personas más importantes para ti, en esa etapa de tu niñez?
JCP.- Mi abuela me adoraba, me
protegía y defendía; yo era feliz en casa de mis abuelos y me iba allí cada vez
que podía.
ERDELV.- Alguien dijo que la
lectura es al espíritu lo que el ejercicio al cuerpo, pero nunca olvidaré lo
dicho por André Maurois. “La lectura de
un buen libro es un diálogo incesante en que el libro habla y el alma contesta”. ¿A qué autores
conociste en esa especie de aprehensión iluminada?
JCP- Gustavo Adolfo
Bécquer, Ana Frank, Corin Tellado, Enid Byton, Julio Verne. Luis Chamizo
JCP.- De
no ser por Ignacio Ramón Martín Vega[1], que me conoció por facebook y me propuso escribir a medias una novela,
probablemente nunca hubiese publicado. En esos primeros días de creación estuve
leyendo las novelas que él había publicado, alguna novela premiada en Premios Ciudad de Badajoz y publicaciones de poesía y relatos:
"El vuelo de la
Palabra" del ayuntamiento de
Badajoz.
ERDELV.-¿Cual
de tus libros publicados guardas con cariño, te aportó luz para los nuevos por
venir?
JCP.- Creo que mi primera
novela: "Comenzó en Badajoz, un
alto en el camino" abrió el baúl de mis
secretos. Mi principal característica es la
impulsividad y rapidez tanto en pensamiento como en acción. Si tenemos en
cuenta que mi primera novela publicada tiene aproximadamente un año de vida (
justo en este mes de marzo) y mi segunda obra Dos rombos tiene un mes (la
publiqué en el Corte Inglés el 12/2/2016), no ha pasado tiempo suficiente como
para hablar de "guardar". Aún estoy alimentándolas, la primera con
biberones o papillas y la segunda al pecho.
Aún con la premura de todo esto de lo
que hablamos, de una cosa estoy segura, después de la publicación de mi segunda
obra, Dos rombos, en la que desnudo mi alma y también mi cuerpo, he superado
mis fantasmas y mis miedos y ahora voy a ser yo, digan lo que digan, malo o
bueno.
ERDELV.-Cuántas mujeres conviven en tu interior?
JCP.- En mi hay dos "Julias":
la madre, profesora, ama de casa y abuela abnegada; frente a la mujer pasional,
libre que necesita leer, escribir, estudiar, cuidarse en cuerpo, mente y alma;
viajar, vivir; amar y ser amada.
Una anécdota: el otro día me dijo un
compañero de instituto que yo soy una mutante y que deberían hacernos un
análisis genético a mi familia y a mí; tenemos genes de otra raza.
EREDELV.-¿Por qué lo erótico? Sé que me vas a
contestar “¿Y por qué no?” Pero mi pregunta no va dirigida a tus gustos
personales, sino más bien a la estética literaria..
JCP.-Porque
quería escribir sobre mi extremada sensualidad y sensibilidad inhibidas, mi
deseo de amar y ser amada más allá del plano físico.
JCP.- Durante años sentí un pudor excesivo a expresar mis sentimientos
y mostrar mi intimidad; al pasar la barrera de los cincuenta sufrí una catarsis
en las que mi cabeza pasó de decirme: ni se te ocurra, a: tú exprésate, verás cómo no pasa nada.
ERDELV.- Ser profesor es una alta responsabilidad en
nuestras vidas. Es una de las vocaciones más extremas y difíciles. Ser profesor
significa moldear el carácter de nuestros alumnos e influenciarlos hacia su
propia autonomía. El poeta, escritor que a la vez es profesor debe estar
pendiente en todo momento, de su actuación ante la sociedad como ejemplo. ¿Hay
alguna rivalidad entre la mujer profesora y la mujer poeta?
JCP.-Ernesto, la
mujer profesora está frustrada porque no consigue transmitir su amor a las letras en
particular y a la cultura y educación en general; la otra, la mujer poeta se expresa con total
libertad y se siente útil y valorada por sus lectores.
JCP.- En mi segundo matrimonio mi
situación emocional era tan delicada que perdí la fe en mí, hasta se me pasó
por la cabeza la idea de "desaparecer" Escribía solo como una terapia
anti suicidio, una cuerda a la que sujetarme para no caer en el abismo más
insondable que nunca pude imaginar.
ERdelV.- Una situación
realmente terrible ¿Cómo saliste de esa ‘terapia anti suicidio” ,como tú misma
la llamas? ¿Cuándo llegaste a superar ese ultraje a tu femineidad, a tu
esencia de mujer?
JCP.- Cuando me di cuenta que yo era mucho más fuerte de lo que
pensaba, que no necesitaba a nadie que dirigiera mi vida y que mis hijos eran
víctimas inocentes de las malas decisiones que había tomado en mi vida.
Si había podido entrar en ellas también saldría. No conté nada a nadie,
solo mis papeles lo sabían.
ERDELV.- He leído que
es una mujer a la que no le alcanza las 24 horas del día para resolver sus
problemas. Niños, hogar, nietos, eventos, reuniones, clases, etc. ¿Cómo
resuelven esas tantas mujeres que hay en ti, esa problemática?
JCP.- Tengo una gran energía; duermo poco, no necesito mucho; Intento
llegar a todo lo que puedo, sobre todo a aquello que me carga las pilas:
escribir, leer, bailar, viajar, participar en eventos culturales que me
permitan aprender y compartir todo lo que aprendí a base de caídas. Una de mis
mayores necesidades es convencer a la gente de que sin cultura no hay justicia.
ERDELV.- Más que el hecho de conocer cómo
escribes o a qué hora lo haces, etc., sabiendo que escribes prosa, ¿qué
importancia le das a tus personajes, cómo los escoges y si te has sentido
identificada a ex profeso, con algunos de ellos en el momento de producirse el
fenómeno de creación.
JCP.- Una pregunta muy inteligente, mis personajes dicen lo que Julia no dijo
en su momento, porque no se atrevió, porque quería caerle bien a todo el mundo,
porque quiso ser perfecta y eso es imposible y autodestructivo.
.
ERDELV.- Se ha
hablado mucho de la desaparición del libro impreso. Tengo mis expectativas y
reflexiones ante estas recurrencias en corrillos literarios. ¿Qué piensas sobre
esto?
JCP.- Me preocupa la falta de interés hacia la lectura de
las nuevas generaciones y, hasta he llegado a pensar, que es algo político.
Nuestro sistema educativo va de mal en peor y se va perdiendo, sobre todo en
las clases sociales menos favorecidas
En España se está
empezando a penalizar a los que escriben. Escribir se va a convertir, si no
hacemos nada, en algo prohibido.
ERDELV.- El imperativo
de ver nuestras obras publicadas nos lleva a muchos, como en mi caso, a auto
editarlas en formato digital sin ánimo de lucro. ¿Qué piensas sobre las casas
editoras y los precios de impresión de las mismas?
JCP.- Para mí es muy triste que detrás de toda
actividad humana esté el ánimo de lucro desmedido. Mi primera novela fue
publicada por una editorial pero nunca me he sentido apoyada y, económicamente
hablando, la única ventaja es no haber tenido que arriesgar dinero.
ERDELV.- ¿Cómo
ve a la nueva generación española en el desarrollo literario?
JCP.- Me consta que hay grandes
talentos entre los no reconocidos pero no veo a las administraciones muy
proclives al fomento y difusión de las letras. Mucho me temo que algo o mucho
no funciona bien en este país.Sin editoriales realmente comprometidas con los autores, que arriesguen con
los nóveles y sin apoyo por parte del Estado, el desarrollo literario en España
será cuanto menos complicado. Aquí se aplica eso de más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer. Como ya te dije, creo en otro
apartado, se están aplicando "multas" a los que cobran pensión y
tienen libros publicados. En mi opinión, una caza de brujas sin justificación a
no ser que no se quiera que la gente lea.
ERDELV.- Para finalizar Julia háblame de los proyectos en los que se encuentra en
estos momentos inmersa y qué significación tienen para su vida en términos
generales.
JCP.- Soy delegada para
Extremadura de una asociación de escritores a nivel nacional e internacional.
Mis proyectos son muy ambiciosos, pretendo llegar al mayor número posible de
lectores, entrar en sus vidas y tumbarme en el sofá de sus corazones. Quiero
que mis palabras viajen, que crucen mares y océanos; quiero respuestas desde
todos los rincones del planeta, quiero prosa, poesía; palabras, poemas...
ERDELV.- ¿Desea
agregar algo más, algo que haya quedado sin decir?
JCP.- Dicen que cuando alguien desea algo
intensamente el universo entero conspira para que alcances tu deseo, tú estabas
en medio. Mis palabras ya han cruzado el océano. Sé que me sientes cerca aunque estemos lejos, esa es la magia que yo
deseo.
ERDELV.- Momento
de despedirnos Julia. Gracias, estimada colega, por su tiempo.
JCP.- Discúlpame, no me despido porque no me
voy, sigo aquí contigo, ese es el poder de las palabras que une a los amigos. Un beso.
[1] IGNACIO RAMÓN MARTÍN VEGA, zaragozano, nacido en julio de 1961. Actualmente reside en Anchuelo (Madrid).
“Ser sexi no es tener curvas
ni un trasero de escándalo,
ser sexi es ser mujer
y disfrutar demostrándolo.”
JULIA CORTÉS PALMA. España
ERNESTO R. DEL VALLE. Cuba-EUA
Publicaciones.:
Miércoles de ceniza (Relatos) Editorial Voces de Hoy,
Miami. 2010
Alabanzas y alucinaciones (poesía), Editorial Glorieta.
Miami. 2011
Emboscadas del sueño (Poesía) Editorial Glorieta. Miami
2012.
Amén de Mariposas (Poesía) Editorial Glorieta. Miami.
2014
Razones del Camaleón
(Poesía) Edit. Akerú. Rep. Dominicana 2016
Comentarios
Publicar un comentario